La nueva Ley General de Turismo del Perú, 29408

Mi primer comentario acerca de la reciente promulgaciðn de esta ley es reflexionar para qué sirven las leyes en medio de los procesos de desarrollo y crecimiento como el que estamos pasando. En efecto, el despertar de la economía del Perú de los últimos años, por ejemplo, no se debe a ninguna ley sino a la apertura y acceso a los grandes mercados internacionales, al notable impulso de la economía mundial, cocretamente de China que ha arreciado con la compra de nuestros minerales para que ellos puedan saltar aún más.Es decir, que en este escenario han aparecido los clásicos elementos de los mercados que crecen: la competitividad, calidades, planes estratégicos, marketing,innovaciones,inversiones, proyectos etc. Cuando existe todo esto de manera ordenada, entonces echamos manos a las normas que hagan falta para completar el círculo. No al revés.
En mi larga carrera profesional y testigo presencial del turismo peruano en los últinos 40 años he advertido que hemos sido buenos para emitir leyes de turismo desde los gobiernos de los presidentes Sánchez Cerro, Belaúnde, García y Fujimori con la absurda creencia que dichas normas nos sacarían del fondo o nos harían más competitivos con el sólo hecho de promulgar una norma en medio de las fuerzas del mercado a las que no les interesa las leyes, las normas, los gobiernos. Veamos algunos casos:

. Ley de Creación del Turismo en el Perú No. 7663 de 1 932
. Ley de Creación de la Corporación Nacional de Turismo del Perú No 10 556 de 1 946
. Ley de Creación de la Corporación de Turismo en el Perú No. 14 947 de 1964.
. Ley General de Turismo 24 027 de 1 984.
. Ley para el Desarrollo de la Actividad Turística 26 961 de 1 998.
. Ley sobre Modificaciones Tributarias para el Desarrollo de la Actividad Turística de 1 998
. Ley General de Turismo 29408 del 16 de septiembre del 2009.
No dudo que como ya es tradicional, con la llegada de un nuevo gobierno el 2011, éste también traerá su propia iniciativa.
Ninguna de estas leyes nos ha conducido al crecimiento ni nos han tornado eficientes, competitivos o nos ha otorgado alguna porción del mercado que sostener o conquistar. En nuestro país se cree que solo las leyes generan el desarrollo, sin advertir que los planes, las visiones, las misiones, el largo plazo, el marketing y el posicionamiento son las condiciones esenciales para plantearnos un lugar en el mercado mundial y sudamericano. La única conclusión de este embrollo es que a más leyes de turismo que hemos tenido menos desarrollo hemos logrado.
Esta observación nos conduce a meditar cuán necesario es el ordenamiento para no andar a la deriva mediante un PENTUR pero con metas y un Plan de Marketing concertado y conjunto entre la autoridad gubernamental y la actividad privada para que ambos se tracen el rumbo a seguir.
En cuanto a la norma en sí, debo decir que fui invitado por la presidenta de la Comisión de Turismo doña Alda Lazo para intervenir en los debates en una larga mesa con algunos colegas profesionales y muchos amateurs. Me retiré cuando advertí que la dirección que tomaba el proyecto era como las leyes anteriores que conozco al dedillo.Sin embargo, debo de rescatar de la novísima ley dos cosas importantes: la declaratoria, en el artículo primero, del turismo como política de Estado para el desarrollo del país.Aunque este rezo no es nuevo, vale su posición y convencimiento del aparato del Estado para llevarla a cabo. Espero que así sea. Veremos si es verdad esta propuesta a la primera revuelta callejera, toma de carreteras, puentes, o incendio de aeropuertos. Allí se comprobará qué tan política de Estado es el turismo.

El otro aspecto novedoso y rescatable al que aporté conjuntamente con Luis Lumbreras y Jorge Becerra del CENFOTUR y los representantes de San Marcos, Garcilaso y la U. San Martín de Porres es el Título XI de los Recursos Humanos de la Actividad Turítica en el que el MINCETUR se compra el pleito definitivamente para ordenar o reordenar este aspecto esencial dejado a la deriva y a un segundo plano durante décadas.El tratamiento de este tema permitirá a este ministerio proponer poíticas respecto del quéhacer con los mandos básicos, medios y superiores, y al mismo tiempo, desarrollar las competencias laborales que nos hacen falta para preparar a los cuadros.
De los 49 artículos de la norma, 1 disposición transitoria y 7 finales están llenos de los siguientes verbos: coordinar, promover, incentivar, regular, formular, emitir, aprobar, ..... . Nada de esto genera por sí mismo crecimiento.
Durante mi paso por la Comisión de Turismo del Congreso de la República para proponer una nueva ley pensé que íbamos a tratar temas como: Metas al 2020 de Inversiones, generación de tantos puestos de trabajo para un país con tasas de desempleo altas, tal porcentaje de empleo productivo para las comunidades campesinas y la lucha contra la pbreza, incremento del PBI sectorial al 2020, ampliar la cuota del mercado turístico mundial del actual 0.20% a otra cifra mayor, saltar al puesto 10 del ranking turístico de América, etc. Creí que era una nueva ley distinta. Me equivoqué.No tenía nada que hacer allí.