3 de noviembre 2024. Celebramos 92 años de turismo en el Perú

 En realidad, celebro yo solito este efeméride habida cuenta que vengo arando en el desierto sobre  este tema desde 1987 fecha en la cual publiqué este valioso hallazgo en las páginas de la primera edición de mi libro Introducción al Turismo. No fui escuchado  por autoridades públicas ni privadas y menos por los operadores del turismo del país. A decir verdad, alumnos míos y colegas de la academia siguieron la trascendencia de este aniversario a los que agradezco por su convicción de los que estamos acá por décadas creyendo en lo que somos.

Este descubrimiento, lo hice en 1986 en la Biblioteca del Congreso de la República  en el Anuario de la Legislación Peruana, Edición Oficial, Tomo XXVI, Congreso Constituyente de 1931, páginas 180 y 181. Se trata de la partida de nacimiento del turismo peruano del que pocos saben, pero cuya trascendencia marca un hito en la vida sectorial e institucional. La primera constatación es que no somos un sector joven, sino que cargamos con 9 décadas a cuestas con un sorprendente zig-zag de logros y resultados que nos colocan siempre en media tabla de los países exitosos de América Latina.

 Es interesante advertir que el encargo hecho a la primera institución que gobernó el turismo peruano fuera el Ministerio de Fomento de entonces para que se ocupe de establecer las corrientes turísticas al Perú y, en especial al Cusco. Quiere decir que ya existía esa corriente de viajeros a la que no se hizo más que confirmar y promover su existencia.

A continuación, se solicita al antiguo Ministerio de Hacienda, hoy el MEF, consigne una partida presupuestal con el objeto de establecer en definitiva el servicio. Finalmente, se encarga a la Sociedad del Touring Club Peruana hacer la propaganda turística conveniente. 

92 años después, encontramos una organización que nació con una pequeña oficina para convertirse en el tiempo en una Dirección General hasta el nivel de viceministerio dentro del aparato del Estado. En ese mismo lapso, puedo decir que he registrado desde esa fecha, 9 organizaciones que la han gobernado y regido, en algunos casos con instituciones con sus propias leyes de creación y rentas y en otras con solicitudes de ayuda y cooperación como fue el caso del Touring y Automóvil Club del Perú que tantos servicios le ha prestado al turismo peruano.

Este trajinar de gitano de pasar de mano en mano con distintos entes gubernamentales tal vez haya sido la marca más clara, es decir, lo más estable que hemos tenido ha sido la inestabilidad con los inusitados cambios, relevos, reemplazos, ceses, creaciones, cierres, y nuevamente la inauguración de una nueva gestión. Ese ha sido el devenir de las cosas.

El texto completo aquí:

Ciertamente, hemos tenido días de gloria con la internacionalización y liderazgo que tuvo el Perú muchos años atrás no solo desde el punto de vista gubernamental sino también en el ámbito privado en América Latina, la ejecución del único proyecto estrella que hemos tenido con el Plan COPESCO en Cusco y Puno. Desde allí hasta ahora cero balas, cero puntos. Solo miramos lo que otros sectores hacen.

En mis tiempos, no existían en la producción ni en el PBI ni en las cuentas del BCR otros grandes motores de la economía nacional. Solo algunos cuantitos. Seguíamos nosotros como los líderes de las exportaciones no tradicionales y terceros en los ingresos de divisas tan solo detrás del cobre y luego de nosotros el petróleo, el plomo o pesca. Esa era la realidad.

Más tarde llegaron las 7 plagas para el turismo, empezando con el covid, el golpista Castillo, los que le siguen en el gobierno actual, las protestas sociales y ahora la violencia y sicariato. La de nunca acabar. Pero más trágico es detenerse y ponerse a llorar. Allí es cuando la economía, las grandes inversiones  públicas y privadas empiezan a despertar  por la aparición de un gran comprador: La China.  

Muchos grandes proyectos públicos se anuncian que nos hace saber que dichas actividades progresan,  funcionan, se transforman, invierten, crecen y salen del hoyo del que estuvimos. Miren ustedes los logros de los privados de la agroexportación, la gran minería, agroindustrial, textiles, confecciones, acuicolas, entre otros varios. Todos ellos se han disparado gracias a los beneficios tributarios que han alcanzado mediante leyes debido a la pujanza y terquedad de sus líderes gremiales. Bien por ellos. Un ejemplo simplón:  

Ley No. 31110. Beneficios tributarios. Sector agropexportador y agroindustrial
Menos de 1700 UIT de ingresos netos		Más de 1700 UIT de ingresos netos
Período	Tasa del IR		Período	Tasa del IR
2021-2030	15%		2023-2024	20%
			2025-2027	25%

En el 92 aniversario de mi sector, el mejor presente que puedo darle es hacer propuestas para crecer en grande como los que he mencionado líneas arriba. No con proyectos intrascendentes que no nos hacen crecer. Al igual que el proycto COPESCO de los 70 en el que el Estado invirtió 99 millones de dólares en Cusco y Puno.  Esta vez, será con iniciativa privada mayormente de la que he estado también arando en el desierto. Alguien me escuchará. Veamos.

Empezando con la planificación de un nuevo enfoque, creo que los grandes proyectos deben de considerar la inserción en el mercado de nuevos y grandes proyectos-productos que generen inversiones públicas y privadas con cientos de puestos de trabajo. Son las únicas banderas de hoy para el país colocando alianzas público-privadas, obras por impuestos, adelanto de reintegro del IGV, etc. Todo esto ya existe pero no los proyectos trascendentes. ¿Cómo han hecho nuestros  adversarios? 

México: Tren Maya. 3500 millones de dólares de inversíon y 350 mil nuevos empleos en 5 Estados; Francia: Languedoc-Rousillon que construyó 7 estaciones de verano y miles de puestos de trabajo en 2 provincias ; R. Dominicana, proyecto Cabo Rojo con 15 mil empleos y una inversión de 126 millones de dólares y así...

¿Por qué no podemos hacer algo semejante con lo que decimos que tenemos?

La propuesta que vengo sosteniendo responde a ese criterio: Creo que si el poder ejecutivo y sus brazos de gobierno regionales y sus gremios y empresas son capaces de entender que el turismo es una actividad que genera abundante mano de obra, más que las otras actividades productivas de la economía nacional, precisamente para atenuar los niveles de pobreza, entonces se podrían llevar adelante al menos 3 grandes proyectos de esta naturaleza en las regiones marcadas en rojo y ámbar. Si hubiera un gobernante con visión del futuro, esto podría pasar en el 2031:

1. El pequeño Miami: Tumbes y Piura. Según nuestros cálculos efectuados con mi distinguido alumno Luis Barboza, gerente general del Westin Hotel de Asunción en Paraguay, se generarían acá unos 77 714 empleos directos e indirectos en la fase pre y operativa.  

2. Circuito Nororiental: La Libertad, Cajamarca, Amazonas, San Martín y Loreto. Se producirían unos 47 010 empleos.

3. Selva Central: Junín, Pasco y Huánuco. El efecto de nuevos puestos de trabajo sería de 26 480.

El total de la contribución del turismo a los niveles de pobreza sería de unos 150 mil empleos. Para que esto se produzca las inversiones serían en habitaciones de 3,4 y 5* en hospedajes y apartamentos vacacionales, infraestructura básica y planta turística en mayor parte.  

 Es posible este escenario si trazamos un plan de desarrollo interregional que comprendan las regiones señaladas con un solo objetivo de cambios y transformaciones. Por ahora, las cosas no están planteadas así sino como el antiguo esquema de hacer 25 pertures región por región sin mirar al vecino. A continuación, el atractivo es promover inversiones con incentivos tributarios, así como tienen otros sectores que generan poquísimo empleo en comparación con el turismo pero que sí gozan de esos beneficios.

Mensaje final a los gobiernos regionales involucrados, alcaldes, a la ministra y viceministra de turismo, a los presidentes de gremios regionales y nacionales, academia, prensa, empresarios, inversionistas y gente que tenga la visión del futuro. A tomar acción.