Conforme van pasando los años y las campañas anuales que cada empresa o emprendimiento encara respecto de las grandes escaladas de la demanda como lo es sin duda la Semana Santa, he podido verificar por suerte que cada vez son más los negocios que se preparan profesionalmente para competir y salir airosos de esta oportunidad que les da el mercado.
Es decir, prepararse para vender según un plan de negocios, plan de ventas o Plan de Marketing. Cualquiera sea el camino elegido para prever lo que viene y seleccionar las semanas de altas y bajas son una muestra de los cambios y saltos cualitativos de lo que hay que hacer para no improvisar, adivinar o esperar que la suerte te sonría.
En el Perú, el turismo interno sea convertido en una avalancha que en el 2014 llegó a la increíble cifra de 4 millones y medio de viajes de los que el segmento familia ha tenido mucho que ver. No dudo que al paso que vamos llegaremos en este 2015 a los 5 millones de viajes o tal vez más. La curva el crecimiento así lo indica.
Si el juego está planteado en esos términos, entonces se cae de maduro que para la Semana Santa y las festividades que vienen este año, y para los despiertos y aguzados, el ordenamiento y la planificación son las piezas y herramienta esenciales para crecer. Es decir, al menos, un min plan que comprenda para comenzar, la selección del segmento y nicho de clientes a quienes les gusta determinados servicios, productos o destinos. Si no sabemos esos gustos y preferencias de los clientes , hay que preguntarles.
Pero esa acción forma parte de un trabajo más amplio. Se inserta dentro del marco de un mini plan que tiene objetivos claros de ventas y, sobre todo, metas a alcanzar y logar para luego evaluar lo que se ha alcanzado o dejado de vender o por qué la competencia vendió más o por qué nos pasaron por encima.
Formulando un pequeño mini plan, al menos hecho y cerrado en octubre o noviembre del 2014, hoy día tendríamos una hoja de ruta clara para actuar con prepagos, reservas, confirmaciones y reconfirmaciones resultado de un trabajo previo que se inicia con la base de datos y hacer un trabajo con la fuerza de venas, sean éstas telefónicas, por mail, visitas personales, citas en un segmento definido y claro resultado de una investigación de mercado.
He señalado líneas arriba que un segmento decisivo a intervenir está conformado por las familias. Hay dos camino para conocerlas observando a sus individualidades, sus conductas y estilos de vida. Apelar a www.apeim.com y sus impecables datos de los niveles socio económicos A,B,C,D y E. Son válidos largamente. Para el análisis cualitativo, ir a www.arellanomarketing.com en el que encontrarán nuevas formas de analizar a la demanda. Con ambas piezas de trabajo, se puede llegar lejos.
En el Plan de Marketing de la Semana Santa 2015 debe observar que la nueva clientela nacional no se hace problemas con el precio. Exigen ahora calidad, eficiencia y seguridad en el servicio que compran. Aquí nos jugamos el posicionamiento de la marca. Si eres un agente de viajes y tienes proveedores serios y profesionales, lograrás un lugar expectante en el mercado. Pero si te traicionan, perdiste.
Finalmente, la batalla que debes de librar en internet también es un partido aparte. No vale tener una web. Lo único que cuenta es tener una web y estar en la página 1 de Google. Es todo. Lo demás no es trascendente. Pero para alcanzar este sitial debes de tener una página verdaderamente activa, novedosa y que se mueva casi todos los días. Prepárate para la próxima oleada de la demanda.
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