miércoles, 30 de diciembre de 2009

La promoción de inversiones alto andinas y el turismo

Ha causado enorme revuelo la reciente promulgación de la Ley 29482 Promoción para el Desarrollo de Actividades Productivas en Zonas Alto andinas. En primer lugar por el debate suscitado si las exoneraciones tributarias que promueven las iniciativas de negocios efectivamente afectan el tesoro público. El inefable PPK ha señalado que con este paquete no pasa nada, ni fu ni fa por que allí nadie paga impuestos hace siglos.
Ahora bien, para ubicarnos mejor sobre esta norma, ésta señala que tiene el objeto de promover y fomentar el desarrollo de actividades productivas y de servicios, que generen valor agregado y uso de mano de obra en zonas alto andinas, para aliviar la pobreza.( Art. 1).
Pero ¿Quiénes son las actividades económicas que generan tales desarrollos según el dispositivo? Piscicultura, acuicultura, procesamiento de carnes en general, plantaciones forestales con fines comerciales o industriales, producción láctea, crianza y explotación de fibra de camélidos sudamericanos y lana de bovinos, agroindustria, artesanía y textiles. Punto. Una vez más no está el sector turismo el que precisamente genera más mano de obra, valor agregado y en términos más rápidos para salir de la pobreza.

Estoy convencido, como muchos de mis colegas que la sierra, y en especial la zona alto andina que va más allá de los 2 500 msnm, es la cuna del turismo donde se generan nuestros principales productos como el turismo de aventura, naturaleza, cultural y vivencial. Buena parte de los empleos productivos, así como la producción y consumo se generan acá.
Si agregásemos al turismo a esta ley promotora, estoy seguro que la inversión, los empleos y la producción de servicios se multiplicarían en proporciones geométricas sobre todas las actividades hasta ahora beneficiadas y que tardan en recuperar. Entonces, la gran reflexión a efectuar es con cuál o cuáles actividades económicas podemos sacar mayor partido para combatir las penurias de nuestros campesinos en los términos más rápidos posibles medidos en el tiempo, que sean menos costosos, generen empleo abundante, negocios o microempresas y que se puedan convertir en exportaciones inmediatas sin depredar ni destruir.
También podemos seguir reflexionando en torno a los valores agregados. Aquellas actividades económicas que ofrezcan mayores valores agregados nacionales deben de merecer la más alta prioridad del aparato del Estado en términos de infraestructura básica para que despeguen y obtengan mejores ventajas que aquellas que han de tardar en madurar, consolidarse y tomar un tiempo para posicionarse en el mercado internacional.

La primera interrogante que quisiéramos absolver es ubicar muy bien el papel que desempeña el turismo dentro de la economía serrana y cuál es su ventaja competitiva para comparar su efecto, y a partir de allí, tomar decisiones gubernamentales y empresariales que conduzcan hacia mejores derroteros. En primer lugar observamos que las actividades económicas tradicionales y casi milenarias como la agricultura y la minería están pasando por momentos contrapuestos.
La primera de ellas atraviesa por su etapa más dramática, pues se trata de una agricultura tradicional y milenaria cuyas características centrales se pueden resumir en una producción reducida y limitada a pequeños propietarios y parcelaros, no tecnificada, de autoconsumo y muy pobre. Por otra parte, una incipiente ganadería ha dado como resultado una pequeña producción semi industrial de productos lácteos: mantequillas, quesos, etc., y recientemente el procesamiento de la trucha y la siembra de alcachofas con fines de exportación. En nuestro entendimiento, el campesino seguirá siendo tal y el exportador otro tanto.
Contrariamente, la minería parece pasar por una época de vacas gordas. Con altos precios de los metales en las bolsas internacionales, muchas siguen contaminando y destruyendo, dando poco empleo y viviendo casi a espaldas de las comunidades campesinas de su entorno. La contaminación sin piedad efectuada en La Oroya hace 50 años, Toquepala, Marcona así como el caso de Yanacocha y los comuneros del distrito de Combayo en Cajamarca son una muestra irrebatible de este tema por lo que resulta vano ahondar en este asunto.
Veamos las ventajas competitivas de 6 sectores productivos de la sierra peruana y en ese escenario observemos quién es quién. Estos son: La ganadería, agricultura, turismo, minería, agricultura e industria.
1.- Ganadería.- le vende sólo al mercado nacional, los empleos son locales y tradicionales, la capacitación tradicional, valor agregado incipiente, inversiones pequeñísimas y casi cero exportaciones.
2.- Minería.- le vende al mercado internacional, genera empleos directos e indirectos, la capacitación es sofisticada, no tiene valores agregados, las inversiones son grandes y medianas, tiene cuentas pendientes que saldar respecto de la conservación del medio ambiente.
3.- Agricultura.- le vende al mercado nacional y recientemente se está abriendo a las exportaciones en pequeña escala, la generación de empleo es local y tradicional, la capacitación es inexistente y las inversiones mínimas.
4.- Industria.- le vende al mercado local, la generación de empleo es local, especializado y la capacitación es igualmente especializada, no exporta, las inversiones son casi inexistentes y valor agregado cero.
5.-Turismo.- tiene un mercado nacional e internacional de exportación, los empleos son directos e indirectos, la capacitación es especializada y corta, las inversiones van desde las micros hasta las grandes, valor agregado nacional al 100% y respeta la conservación del medio ambiente.

Ojala que en la reglamentación de la ley que dizque no demorará más de 90 días se incluya al turismo por las razones antes señaladas. No estar acá sería una nueva tragicomedia de las que suele tener el turismo en el Perú y un mal regalo de navidad. Entonces sí que seríamos una republiqueta donde todo es al revés.

2 comentarios:

  1. Otra vez se aprecia el desinterés de las autoridades, que chiste tiene el querer sacar una ley sin previo análisis, porque para que hayan sacado una ley para la promoción en los Andes y que no hayan incluido al Turismo como actividad generadora de empleos, esto quiere decir que no han hecho un buen trabajo. Se ve en todo el mundo la importancia de esta industria sin chimenea para la generación de riquezas, pero aquí en el Perú parecen no notarlo, ayyyyy…. En fin esperemos a ver qué pasa en estos 90 días, claro si es que pasa.

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  2. jair pizarro herrera22 de marzo de 2010, 19:41

    el turismo solamente esta designado para personas con capacidad mas no al campesino teniendo en cuenta que los valores agregados son producto de la mano de obra del campesino en un gran porcentaje. el gobierno se ha desinteresado por completo por no poner enfasis a la mano de obra que representa a la poblacion rural es por eso q la andino vive en un conformismo total .

    la solucion es que se debe crear nuevas leyes q favorescan a la personas mas necesitadas y de esta manera sali de la pauperrime pobreza q indirectamente sigue la explotacion del hombre por el hombre; el tiempo de los terratenientes se notaba q habia una super produccion y q la reforma agraria a traido un debacle por su mala aplicacion y que todas las riquezas existente se han venido abajo!!!!.


    para el campesino la solucion es que se forme empresas q produscan trabajo mediante tecnologias que imvolucren sus productos por ejemplo la exportacion de tejidos, productos lacteos,etc.

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