Un nuevo aeropuerto regional para Amazonas.

Creo que lo primero que hay que observar es que República Dominicana, un bello país del Caribe, del tamaño de  la región San Martín, tiene 7 aeropuertos internacionales para recibir a sus 6 millones y medio de turistas el 2018. Ciertamente es otra realidad pero la visión de sus gobernantes en el futuro de su turismo, equivalente al gas de Camisea del Perú o al petróleo de Venezuela, es el de acercar los segmentos de mercado a su eficiente oferta.

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Pero el caso que nos ocupa tiene otra vertiente. Para el país caribeño tener y sostener esos aeropuertos es de vida o muerte para su economía. Todo o nada porque reconocen que la ventaja competitiva del turismo supera largamente a otras casi escasas actividades de producción. Entonces, la política gubernamental es prioritaria y esencial para catapultar el turismo hacia mayores ventajas para sus empresas, emprendedores, profesionales, taxistas y una larga cadena productiva. 

Ahora regresamos a las promesas del presidente Vizcarra de analizar la posibilidad de tener un nuevo aeropuerto regional para Amazonas.Con la misma vara con la que han medido los dominicanos a su turismo podríamos argumentar que la vocación turística de Amazonas es la única ventaja competitiva que tiene esa región muy por encima de las posibilidades que tienen ahora la ancestral agricultura y ganadería que hacen que siga siendo pobre.

En otros términos, si el turismo no asume su papel de motor de la economía no solo en esa región sino en todo el norte, habremos asegurado que continué la pobreza por 50 años más. Y un aeropuerto que conecte al merado a esa región viene como anillo al dedo y ojalá que sea una de las obras dentro del Plan de Infraestructura del MTC.

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Dice LATAM que la ruta Lima-Jaen, luego de dos años de operar en la zona ha transportado cerca de 270 000 pasajeros y ahora hay dos vuelos diarios.  La situación es que tenemos dos aeropuertos en la zona: Jaen y Chachapoyas. El primero se ha tornado el elegido por las lineas aéreas debido a que en ese lugar hay menos neblina que en el segundo. Por tanto más seguro. Sin embargo, el asunto va por otro camino lejos de construir uno nuevo a ampliar el de Chachapoyas. 

Construir uno nuevo significa ignorar que existen dos de ellos cerca. Me parece que  lo mejor es ampliar o mejorar el de Jaen y convertirlo en un aeropuerto regional de primera categoría y traer a los turistas hasta Chachapoyas en una moderna carretera asfaltada, iluminada y señalizada en buses de primera calidad. Habremos matado varios pájaros de un tiro, potenciada la región y convertida la región en un verdadero producto turístico con ventajas para miles de familias.